¿Y si el Big Data es también para tu organización?

El concepto Big Data es cada vez más habitual en el mundo empresarial, ya que tratar un alto volumen y variedad de datos es ya un activo básico y disponer de los datos de una forma rápida y precisa puede permitirnos actuar en consecuencia y en el momento justo. 

Y aunque habitualmente asociamos el uso del Big Data a la monitorización del comportamiento en e-commerce (tasa de conversión, coste por lead o ratio de recurrencia) o control de costes en entornos financieros (coste de stocks, cantidad de producto semi terminado o contribución de cada departamento al gasto total), existe una amplia variedad de campos donde descubrir el valor de dichos datos es crucial. 

¿Por qué utilizar Big Data en el desarrollo organizacional?

Un ejemplo claro de un área donde el Big Data cobra cada vez más fuerza es en desarrollo organizacional, donde disponiendo de suficientes datos y de suficiente calidad sobre el estado actual de una entidad, podremos actuar primero en aquellas partes en las que detectemos mayores necesidades de liderazgo o aquellas que acumulen mayores problemas a la hora de entregar valor. La eficiencia operativa y el impulso a la innovación que puede resultar de dar los pasos correctos apoyados por datos objetivos y claros pueden ser clave para la transformación de una organización a largo plazo y, sobre todo, de forma permanente. 

Realizar un buen assessment inicial es clave, con un análisis exhaustivo de las necesidades y estado actual, así como recopilar los datos de la manera adecuada, pero sin las ventajas de un buen cuadro de mando, puede que los árboles no nos dejen ver el bosque. La capacidad de identificar patrones por rangos de edad, antigüedad en el puesto o departamento pueden dar las claves de por donde comenzar la transformación. 

En conclusión, emplear Big Data puede traducirse en lo siguiente:

• Mejora de la toma de decisiones debido a la cantidad de información disponible.
• Optimización de los activos en función de los datos obtenidos en el proceso.
• Reducción de gastos, identificando posibilidades de ahorro en función de los datos obtenidos.
• Mayor facilidad para saber lo que el cliente busca gracias al análisis de datos.
• Identificación de nuevas fuentes de ingresos, comprendiendo tendencias y comportamientos de los clientes antes de tomar una u otra dirección.

¿Dónde ya se utiliza el Big Data?

Hoy en día, existen varias industrias en las que el Big Data ha cobrado un papel muy importante

• En la industria del retail ya es posible predecir tendencias, pronosticando cuál será la demanda de ciertos productos, adecuando los precios para obtener una ventaja competitiva e identificando a potenciales clientes.
• En el sector financiero se está implementando para ser más eficiente, centrarse más en el cliente y ser más rentable, además de para analizar riesgos y monitorear la actividad del mercado. Las instituciones financieras utilizan el análisis del Big Data para eliminar sistemas superpuestos y redundantes, así como facilitar el acceso a los datos.
• En el sector de la salud, la medicina y la investigación precisan recopilar mucha información y necesitan herramientas de análisis propias de esta tecnología, que les da acceso a grandes cantidades de datos de pacientes y de la población, mejorando así la atención médica, realizando investigaciones más efectivas, desarrollando nuevos medicamentos y obteniendo información sobre los patrones relacionados con la salud de la población.
• En la industria moderna, con el avance de la tecnología y la creciente automatización en la fabricación, los datos son grandes aliados al incorporar sensores en los equipos, ayudando a controlar la salud y eficiencia de las máquinas.

¿Qué herramientas son útiles en este aspecto?

Programas como Power BI, integrado dentro de la suite de office o DataStudio, de la mano de otro gigante tecnológico como Google, ya son herramientas básicas en muchas empresas y los cuadros de mando que se pueden crear con ellas, parte vital del día a día de muchas empresas. Disponer de una manera visual, rápida y personalizada de los datos y patrones extraídos, optimiza la toma de decisiones tanto a nivel estratégico como del día a día de una forma clara y sencilla. 

 Si hasta ahora pensabas que no son para ti ni para tu organización, quizás quieras pensarlo de nuevo.